El alemán está en el país por segunda vez, luego de la exhibición que brindó junto a Roger Federer en noviembre de 2019, en el estadio de Parque Roca. La estadía del europeo se desarrolla con varias visitas a lugares emblemáticos de la ciudad, que incluyó el encuentro entre Boca e Independiente Rivadavia del martes último.
Los chicos son los que iran mucho al alemán, y cada paso que recorre por el club de Palermo es solicitado para una fotografía o la firma de alguna prenda. Zverev accede con gentileza y de esa manera se va ganando el aprecio de todos. El europeo es uno de la candidatos firmes a quedarse con el título, y el viernes volverá a jugar por los cuartos de final.
Fonseca buscará también instalarse en esa instancia, y para ello este jueves tendrá que superar a Federico Coria, a partir de las 13.30. El brasileño es otro de los que adquieren la simpatía del público, y con su inocencia se sigue ganando el cariño de los argentinos. Los seguidores lo comparan con el gran Gustavo Kuerten, quien dominó el circuito entre fines de los '90 y principios del 2000.
El joven Fonseca prefiere ser cauteloso cuando le endilgan esa condición, y elige el bajo perfil para no perder el foco de su objetivo. El jugador, durante la conferencia de prensa que brindó el domingo último, se encargó de aclarar que no trabaja con ningún psicólogo deportivo, y que se siente mentalmente estable en este presente de gran repercusión mediática.
Tanto Zverev como Fonseca continúan conquistando la aceptación de sus fanáticos, y los dos intentarán plasmarlo llegando lo más lejos posible en este Argentina Open.
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